Se realizó la Fiesta Patronal de San Francisco Javier el pasado 3 de diciembre a las 19:30hs. Allí, junto a la comunidad, estuvo el Arzobispo de Buenos Aires, Mons. García Cuerva en un clima de festividad y emoción una importante cantidad de feligreses se acercaron a la Iglesia (Jorge Luis Borges 1855).
En uno de los templos históricos para la Arquidiócesis, ubicado en el barrio de Palermo, Mons. García Cuerva destacó en su homilía las notas de santidad de las que habla el Papa Francisco y mencionó: “Una de las característica es ser creativos y audaces, es decir, animarnos. No quedarnos en el recuerdo que todo tiempo pasado fue mejor. Pidamos hoy que San Francisco Javier nos regale su audacia, que nos regale su garra, su pasión. La vida está para ser vivida y gastada por los demás, así lo hizo Jesús y así lo hizo San Francisco Javier».
Otra de las características de las notas de santidad que mencionó fue la alegría y el buen humor. “En algún texto en el que Ignacio de Loyola resaltaba la alegría que tenía San Francisco Javier y consultó ¿Por casa cómo andamos? ¿Dónde nos quedó el buen humor? Lo segundo que le pedimos a Francisco Javier es que nos regale la alegría y el buen humor«.
Como tercera nota de santidad que menciona el Papa Francisco es la paciencia y destacó: “Vamos a pedirle a Dios que nos regale la paciencia, incluso en las actividades nuestras de la parroquia. Pidámosle a Francisco Javier que nos regale la paciencia»
A modo de destacar las últimas dos notas de santidad Mons. García Cuerva destacó la oración, “Animarnos a saber que con Dios tenemos que hablar y contarle las cosas que nos pasan. San Francisco Javier puso toda su vida en las manos de Dios”. En relación a la última nota destacó la comunidad. “No podemos ser santos si nos cortamos solos, no podemos ser santos si entre nosotros nos chusmeamos. Necesitamos ser familia, somos hermanos”.
Para concluir, ante la comunidad y las cámaras de Orbe 21, enfatizó: «Pidámosle a San Francisco Javier que nos regale estas notas de la santidad; que seamos audaces y creativos, pidamos alegría y buen humor. Pidámosle también que seamos cristianos pacientes, pidamos que podamos poner la vida en oración”.
