Por Claudia Cabrera
Esperanza y transformación en movimiento
«La esperanza en América Latina tiene un rostro femenino», afirmó el Papa Francisco, resaltando la importancia de las mujeres en la Iglesia y en la sociedad. En este marco, se realizó el Tercer Encuentro Nacional de Mujeres de la Familia Grande de los Hogares de Cristo (FGHC), que reunió a 260 mujeres de todo el país en el polideportivo municipal de Paso del Rey, en la diócesis de Merlo-Moreno.
El evento, organizado desde septiembre por el equipo nacional de mujeres de la FGHC, estuvo marcado desde el inicio por un mensaje profundo e integral que termino siendo el lema del encuentro: «Somos mujeres resilientes, que desde experiencias de dolor no nos quedamos quietas, nos transformamos y generamos nuevas experiencias de vida. Caminar al modo de María, primereando, llegando antes, recibiendo y abrazando la vida como viene.»
La fuerza femenina en movimiento
En conversación con María Elena Acosta, coordinadora y referente de los centros del Hogar de Cristo, conocimos más sobre este encuentro. «El rol de la mujer dentro de una Iglesia abierta y en salida es fundamental. Somos mujeres asumiendo espacios de liderazgo, como lo propone el Papa Francisco cuando sostiene que la ‘esperanza en América Latina tiene un rostro femenino’. Las mujeres de nuestros barrios llevan adelante un trabajo silencioso, pero imprescindible, en ollas populares, comedores, espacios educativos, centros de primera infancia, clubes parroquiales, catequesis, grupos de exploradores y comunidades diversas», explicó.
El encuentro no solo fue un espacio de reflexión, sino también de fortalecimiento. Acosta subrayó: «Somos mujeres en movimiento dentro de la Iglesia, constructoras y transformadoras de realidades.»
Un espacio para todas
Participaron mujeres de diversas regiones del país, incluyendo AMBA, Concordia, Pichanal, Tucumán, Santiago del Estero, Añatuya y La Rioja. La elección de un fin de semana largo permitió la inclusión de quienes venían desde el interior, consolidando la idea de unidad y comunidad que sustenta estos encuentros.
En cuanto a los próximos pasos, el próximo encuentro nacional ya está en marcha: programado para el 21 de junio en Luján, será organizado de manera conjunta entre la FGHC y Cáritas Nacional, con el apoyo de las áreas de Barrios Populares y Educación.
Estos encuentros no solo reflejan el trabajo diario de las mujeres, sino también su capacidad de transformar dolor en acción y esperanza. El rostro femenino de América Latina sigue marcando el camino hacia una Iglesia más inclusiva y una sociedad más justa.
Fuente: Revista Comunicarnos Enero/Febrero 2025
