El sábado 26 de febrero la Vicaría para Niños invitó a participar del primer Encuentro 2022: “DESAFÍOS Y OPORTUNIDADES” en la parroquia Nuestra Señora de los Dolores de la ciudad de Buenos Aires. Los invitados fueron animadores de comunidades, de decanatos y vicariales de esta Vicaría.
En el encuentro “se cantó, se bailó, se rezó, caminamos juntos el camino de Jesús, la presencialidad fue un reencuentro tan esperado”, compartió entusiasmada Susana Abásolo, referente de la Vicaría de Niños.
También, mediante el programa digital Mentimeter, se buscó definir en una palabra entre los casi 150 asistentes cuál es el mayor desafío en las comunidades hoy. De esta búsqueda surgió la palabra “compromiso”.
Otra de las referentes vicariales y quien edita los subsidios que llegan a todas las parroquias, Giselle Virdó, compartió que en el Sínodo se trabajaron “cuatro puntos: amor servicial, amor testimonial, celebración festiva y comunión sinodal” que se asumen en la pastoral de niños de Buenos Aires. ¿Y cómo?
“Del amor servicial tomamos que somos misión y que fomentamos espacios para discernir juntos; del anuncio tomamos el primer anuncio, la formación y misión, la pastoral digital y los procesos comunitarios de la fe; de la celebración festiva asumimos la animación festiva, crear escuelas de animación litúrgica y la piedad popular; de la comunión sinodal tomamos la corresponsabilidad, el protagonismo laical y la conversión pastoral, el estilo sinodal y la espiritualidad de comunión”, explicó Marisa Herrero, secretaria ejecutiva de la Vicaría de Niños.
El vicario para esta Pastoral y obispo auxiliar de Buenos Aires, monseñor Ernesto Giobando sj, centró su catequesis en el capítulo 9 del Evangelio de Lucas: “Jesús fue un hombre de camino, un hombre que pasó gran parte de su tiempo, de sus 3 años, caminando. Y, siguiendo las palabras del Papa Francisco, Jesús fue un callejero, estuvo en la calle gran parte de su misión. Tuvo encuentros en casas de familia, en el camino, en el templo, algunos encuentros personales, otros comunitarios, pero generalmente en el evangelio se utiliza el plural, rara vez se utiliza el singular. Porque Jesús vino a mostrarnos el camino comunitario de la fe por eso funda una ‘ecclesía’, una iglesia, una asamblea, una comunidad”.
El obispo cerró con esta reflexión: “Queridos catequistas: Volvemos otra vez a estar en el camino. Hemos vivido un sínodo. Hay muchos desafíos por delante pero también hay muchas oportunidades. No tenemos vergüenza de ser cristianos. Tenemos una misión. Ahora vamos a tratar de ir metiéndonos en esta realidad de Buenos Aires y que el Espíritu de Jesús, que hemos tratado de percibir en este capítulo 9 de Lucas, vaya impregnando nuestra vida: somos una misión”.
El padre Iván Dornelles, director ejecutivo de la Vicaría de niños y párroco de Nuestra Señora de la Misericordia de Mataderos, hizo un paneo de la realidad pospandemia para la pastoral de niños: “Tenemos que recuperar la misa de niños en nuestras parroquias, como dijimos en el sínodo: reimaginando y revitalizando la liturgia para los niños. Ponernos en los zapatos de los chicos es un buen comienzo. Un encuentro con niños es con juegos y en clima de fraternidad. Hagamos encuentros, reunámonos y reimaginemos. En la página web de la Vicaría de Niños van a encontrar el Directorio Litúrgico para las misas con participación de Niños que puede ser mucha utilidad en sus sugerencias. Y recordemos los momentos de la misa en los que los chicos son más felices, por ejemplo, el saludo de la paz: suele haber un poco de lío, en algunas comunidades lo eliminan pero si se arma lío no pasa nada, significa que estamos vivos. Ojalá que en cada templo hubiera un ‘espacio para chicos’ a la altura de ellos con una alfombrita, un cuaderno, una imagen de la Virgen, crayones, santitos, todo en tamaño niños. Y este año volvemos con la Misa Arquidiocesana de niños al Luna Park: sábado 22 de octubre a las 11 hs. Estamos muy felices de volver a estar juntos”.