En la Ciudad de Buenos Aires, existen pequeños oasis de oración, devoción y espiritualidad: los Santuarios que, dispersos por los diferentes barrios, congregan a peregrinos de todas partes que se acercan con sus intenciones y peticiones. En esta octava de Pascua, dos de ellos celebran sus Fiestas Patronales: El Santuario de San Expedito en Balvanera, y el Santuario de Jesús Misericordioso en Villa Urquiza.
Los Santuarios lo son, no por designación de alguna autoridad, sino porque el mismo pueblo de Dios los hace así al visitarlos con gran devoción a su patrono y generar una mayor afluencia de peregrinos de todo el país que se acercan en busca de consuelo, con peticiones y agradecimientos.
El Santuario de San Expedito, santo de las causas justas y urgentes, es uno de los santuarios más grandes de la ciudad, uno de los que tiene mayor concurrencia de fieles y peregrinos que visitan la casa del santo para rezar por devoción personal, para agradecer y pedir por salud, entre otras intenciones particulares.
En medio de una zona comercial, donde también abundan los consultorios médicos las obras sociales y al ser un lugar de trasbordo por el cruce del tren, varias líneas de subtes y metrobus; el Santuario recibe visitas todo el tiempo, sobre todo los días 19 de cada mes y en especial esta semana, que festejó sus fiestas patronales el martes 19 de abril.
Por su parte, el Santuario de Jesús Misericordioso, el primero en argentina dedicado a esta imagen de Jesús, es una fuente especial de la misericordia de Dios, un espacio donde los fieles pueden experimentar de manera especial a Dios mismo.
Los peregrinos se acercan al Santuario en Villa Urquiza para buscar la gracia y la misericordia de Dios, para cobijarse en los brazos de Jesús, para expresar su confianza y seguir poniéndose en sus manos, justo en el medio de esos brazos que dejan al descubierto un corazón que gotea sangre y agua.
El segundo domingo de Pascua se celebra la Fiesta de la Divina Misericordia, y el Santuario se prepara para recibir a todos los peregrinos que se acercarán para festejar sus patronales este 24 de abril, como lo hacen el día 26 de cada mes, día mensual de la misericordia.
Ambos Santuarios prepararon grandes festejos para la fiesta de sus patronales. El día martes 19 de abril, el Santuario de San Expedito abrió sus puertas para celebrar misas a toda hora, con posibilidad de recibir bendiciones y el sacramento de la confesión durante todo el día, por la tarde realizaron una procesión por las calles aledañas con la imagen del santo y compartieron una Hora Santa al atardecer, en la que los peregrinos dejaron sus intenciones a los pies de Jesús por intercesión de San Expedito.
Los festejos del Santuario de Jesús Misericordioso en Villa Urquiza, se preparan para el domingo 24 de abril, con misas que se celebrarán en las calles del barrio en múltiples horarios y una procesión por el barrio con el ícono de Jesús Misericordioso a las 16:00 h. Además los sacerdotes estarán administrando la reconciliación, sacramento central de la devoción a la misericordia de Dios, en las calles que rodean el Santuario, y se realizará el gesto de la imposición de manos al final de cada misa, una bendición especial para todos los peregrinos.
Los Santuarios en la Ciudad son espacios donde el encuentro con Dios se da de un modo nuevo y especial, donde el desconocido deja de ser una persona más para convertirse en compañero de camino, y donde la gracia de Jesús llena las almas de sus fieles por intercesión de los santos o advocaciones que visitan con fe y devoción.