En el programa Poliedro, emitido por Orbe 21, la periodista y conductora del segmento Gabriela Laschera dialogó con el padre Julio Merediz sobre el Papa Francisco y su llamado a la esperanza . En esta entrevista abordaron temas como la esperanza de los cristianos, la unión que genera la oración de los fieles y el estado de salud del Santo Padre. 

Frente a la consulta de la conductora sobre la esperanza en los tiempos actuales el padre Julio reflexionó: “La esperanza está metida y arraigada en el deseo más profundo del hombre. Me acuerdo de leer un filósofo que decía `si hay sed, existe el agua´. Entonces, si hay ese deseo de bien, esa es la esperanza, está en todas las personas. No es algo que viene de afuera. No, es de adentro. Es como el amor. Después, la persona puede coartarlo, puede frustrarlo, puede aniquilarlo, pero en el fondo, en el deseo de cualquier persona, crea o no crea, más allá de cualquier situación cultural que haya nacido o esté viviendo, está este deseo, esta expectativa del bien, que vive en su corazón. Y esa es la esperanza”. 

El ancla como sinónimo de esperanza

Esa metáfora del ancla es maravillosa, pero casualmente el ancla es posible porque está ese deseo de esperanza del bien, que para nosotros es el bien mayor el encuentro con Dios y con Jesucristo final. Alguna vez escuché a Francisco hablar de horizontes amplios, esos horizontes que te abren, por eso, algunos le llaman a la esperanza como una virtud infantil, se encuentra siempre reconociendo lo bueno que existe en él, los niños siempre ven lo bueno”. 

Al recordar actos concretos en los que se refleja la esperanza aclaró: “Una sonrisa es esperanza, un acto gratuito de caridad, de amor, de visita, es esperanza. La amabilidad es esperanza, un gesto de ayuda, todos signos. Ahora dentro del marco del jubileo todo esto entra y hay una parte que es fundamental, que es, dice `un acto de misericordia para con el otro´, es un reencuentro con el prójimo, ese reencuentro puede ser de muchas maneras, yo creo que el más profundo de esperanza es la reconciliación, es decir, el reconciliarte con el otro es un acto de esperanza”.

También el padre Julio recordó la importancia del sacramento conocido como “Unción de los enfermos” y destacó: “Es una gracia muy grande así que yo diría animaría a que la gente lo pida y lo busque, no tiene por qué estar muy enfermo, si hay una persona mayor puede recibirlo, conviene que lo reciba pues es una gracia que nos da el Señor”.

Reflexión sobre la salud del Papa Francisco

“El Papa Francisco en su enfermedad genera en nosotros una comunión eclesial fantástica. La oración del que ora por el enfermo lo ayudará. Jesús ora muchas veces cuando va a sanar y Él siempre está en oración, cuando se encuentra con las grandes multitudes. En este caso, rezamos por el Papa y nos unimos como Iglesia en comunión entre todos”.