El sábado 14 de junio se celebró la Santa Misa en el marco de la fiesta patronal en la parroquia San Ildefonso. La celebración Eucarística estuvo presidida por el arzobispo, Mons. García Cuerva quien, a la luz del Evangelio, mencionó: “Hoy ustedes celebran su fiesta patronal, ¿Cómo esta comunidad, de San Ildefonso, puede parecerse a nuestro Dios? A ese Dios que es Santísima trinidad. A ese Dios que es familia. Una familia de tres. Padre, Hijo y Espíritu Santo. Nosotros somos una familia de muchos”.
Luego en su locución agregó: “No significa que seamos todos lo mismo. No, esto no es una fábrica de salchichas, es una familia. Y si es una familia, tenemos que aprender a respetar la diversidad” y añadió: “Corren por nosotros la misma sangre. La sangre de Dios, porque fuimos creados a su imagen y semejanza”.
Comunidad abierta
“La lectura nos dice que el amor de Dios está en nuestros corazones. Nos lo regaló el Espíritu Santo, porque Dios quiso comunicar ese amor. No se lo guardó para él. Lo comunicó. Por eso nosotros, tenemos la linda experiencia que podamos tener acá en la comunidad. No es para guardarla entre nosotros” mencionó y subrayó: “Deben ser una comunidad abierta. Abierta a comunicar ese amor a otros. Abierta a comunicar la buena noticia a otros”.
Comunicar la esperanza
También agregó: “Queremos ser comunidad, familia. Así como somos una comunidad que quiere estar abierta. Y compartir ese amor para con los demás. También pensar que seamos una comunidad que sea ese mismo testigo de esperanza. La esperanza también radica en que nosotros creemos en un Dios que nos ama. En un Dios que no nos deja tirados, en un Dios que no nos defrauda, en Él radica nuestra esperanza”.
Una comunidad familia
“Nuestro Dios se dio en familia. Por lo tanto. Queremos ser la familia de San Ildefonso. Una familia en la que nos respetemos. A pesar de ser delincuentes. Y en la que capaz que haya de vez en cuando alguna pelea” mencionó Mons. García Cuerva para concluir su homilía en esta fiesta patronal.
